1000 Millas Sport: Ícono de la actividad
Así cataloga a las 1000 Millas Sport, el tetra campeón argentino de la competencia, Fernando Sánchez Zinny. Tras ganar las ediciones de 1992, 1995, 1996 y 2002, sostiene que la gran secreto que motiva a los coleccionistas a participar del evento es “la pasión por los autos“.
“Ya ni me acuerdo cuando gané“, dice en broma el triunfador máximo de las 1000 Millas Sports de la República Argentina. Si bien cada año renueva la esperanza de volver a disfrutar de las mieles del éxito, Fernando Sánchez Zinny no deja de reconocer que “antes era más fácil ganar porque había menos competidores y menos gente que hacía las cosas muy bien. Actualmente, en línea de largada, tenemos 10 a 15 participantes que compiten en un alto nivel y pueden triunfar sin ningún problema. Esta mucho más peleado que antes. De hecho, cuando gané las primeras 1000 Millas, allá por 1992, el margen de error era de 20 centésimas. Hoy, con ese margen, estaría ubicado en el puesto 82“.
Tal como lo destaca Sánchez Zinny, el nivel es extremadamente competitivo por estos días. Las pruebas de regularidad, reservadas para Autos Sport Clásicos, no sólo tienen cada vez más adeptos, también más especialistas y eso hace que, vencer en las 1000 Millas, sea considerado como la gran consagración de la temporada. Por ello, es la carrera en la que todos quieren estar.
“Sin dudas, son el ícono de la actividad en el país. Pero también, esto se hace porque nos gustan los autos. Es estar junto a un grupo de gente con la que compartimos lo mismo. Y si a esto le agregas una competencia, lo hace más picante todavía. Lo que no hay es profesionalismo porque nadie corre por plata. El objetivo principal de todo esto es sacar los autos a pasear y las competencias están diseñadas para que se pueda hacer de ese modo. Pero es cierto que hoy hay un grado de competitividad muy alto, que cada año es mayor, y eso me parece que es muy bueno”, explica Sánchez Zinny quien festejó la primera vez con un Porsche 356 1960. Después lo hizo dos veces con un Triumph TR3 A de 1960, y -finalmente- con un Alfa Romeo 1750 GS 1930.
La meta -para la edición de este año- es completar las tres etapas: Bariloche-Esquel, Bariloche-La Angostura y Bariloche-Lago Escondido con un auto muy especial para él.
“Hace 6 años que vengo trabajando en un proyecto que hasta ahora viene fracasando pero que no lo voy a abandonar: correr con un Amilcar CGSs 1927, que rescate después de muchos años y estoy armando y preparando con mucha paciencia. Creo que este año estará en condiciones para dar toda la vuelta, si Dios quiere“, remarca con fe y orgullo.
Al igual que el año pasado, las 1000 Millas Sport fueron declaradas de Interés Turístico Nacional por el Ministro del área, Enrique Meyer. A un mes del cierre de las inscripciones, de los 110 binomios inscriptos (el cupo máximo son 150) más de 30 representan a nacionalidades extranjeras.
Así como cuando vinieron los mejores del mundo, a mediados de los noventa, esta de 2012 es una buena oportunidad para medir fuerzas con participantes de Rusia, Alemania, Inglaterra, Chile, entre otras.
“En 1996 tuve la suerte de ganarles a los italianos que venían por primera vez a Bariloche, y eso -de alguna manera- también abrió un camino para ir a competirles a las Mille Miglia. Si tengo que comparar la carrera que se organiza en Italia con la que se organiza en Argentina diría que: Italia tiene su paisaje, su gente, algo que acá se repite cuando se corre en Córdoba, considerando el fanatismo que en esa provincia hay por los autos. Italia es la historia. Argentina, después, desde el punto de vista de la competencia, del recorrido, de la hospitalidad, no tiene -absolutamente- nada que envidiarle“, elogia Sánchez Zinny.
Fuente: Prensa 1000 Millas Sport
“Ya ni me acuerdo cuando gané“, dice en broma el triunfador máximo de las 1000 Millas Sports de la República Argentina. Si bien cada año renueva la esperanza de volver a disfrutar de las mieles del éxito, Fernando Sánchez Zinny no deja de reconocer que “antes era más fácil ganar porque había menos competidores y menos gente que hacía las cosas muy bien. Actualmente, en línea de largada, tenemos 10 a 15 participantes que compiten en un alto nivel y pueden triunfar sin ningún problema. Esta mucho más peleado que antes. De hecho, cuando gané las primeras 1000 Millas, allá por 1992, el margen de error era de 20 centésimas. Hoy, con ese margen, estaría ubicado en el puesto 82“.
Tal como lo destaca Sánchez Zinny, el nivel es extremadamente competitivo por estos días. Las pruebas de regularidad, reservadas para Autos Sport Clásicos, no sólo tienen cada vez más adeptos, también más especialistas y eso hace que, vencer en las 1000 Millas, sea considerado como la gran consagración de la temporada. Por ello, es la carrera en la que todos quieren estar.
“Sin dudas, son el ícono de la actividad en el país. Pero también, esto se hace porque nos gustan los autos. Es estar junto a un grupo de gente con la que compartimos lo mismo. Y si a esto le agregas una competencia, lo hace más picante todavía. Lo que no hay es profesionalismo porque nadie corre por plata. El objetivo principal de todo esto es sacar los autos a pasear y las competencias están diseñadas para que se pueda hacer de ese modo. Pero es cierto que hoy hay un grado de competitividad muy alto, que cada año es mayor, y eso me parece que es muy bueno”, explica Sánchez Zinny quien festejó la primera vez con un Porsche 356 1960. Después lo hizo dos veces con un Triumph TR3 A de 1960, y -finalmente- con un Alfa Romeo 1750 GS 1930.
La meta -para la edición de este año- es completar las tres etapas: Bariloche-Esquel, Bariloche-La Angostura y Bariloche-Lago Escondido con un auto muy especial para él.
“Hace 6 años que vengo trabajando en un proyecto que hasta ahora viene fracasando pero que no lo voy a abandonar: correr con un Amilcar CGSs 1927, que rescate después de muchos años y estoy armando y preparando con mucha paciencia. Creo que este año estará en condiciones para dar toda la vuelta, si Dios quiere“, remarca con fe y orgullo.
Al igual que el año pasado, las 1000 Millas Sport fueron declaradas de Interés Turístico Nacional por el Ministro del área, Enrique Meyer. A un mes del cierre de las inscripciones, de los 110 binomios inscriptos (el cupo máximo son 150) más de 30 representan a nacionalidades extranjeras.
Así como cuando vinieron los mejores del mundo, a mediados de los noventa, esta de 2012 es una buena oportunidad para medir fuerzas con participantes de Rusia, Alemania, Inglaterra, Chile, entre otras.
“En 1996 tuve la suerte de ganarles a los italianos que venían por primera vez a Bariloche, y eso -de alguna manera- también abrió un camino para ir a competirles a las Mille Miglia. Si tengo que comparar la carrera que se organiza en Italia con la que se organiza en Argentina diría que: Italia tiene su paisaje, su gente, algo que acá se repite cuando se corre en Córdoba, considerando el fanatismo que en esa provincia hay por los autos. Italia es la historia. Argentina, después, desde el punto de vista de la competencia, del recorrido, de la hospitalidad, no tiene -absolutamente- nada que envidiarle“, elogia Sánchez Zinny.
Fuente: Prensa 1000 Millas Sport
1000 Millas Sport: Ícono de la actividad
Reviewed by Damián Fanelli
on
8:41 p.m.
Rating:
No hay comentarios.
Deja aqui tus comentarios!