Hirvonen rechaza el trofeo del Rally de Australia

Unas pocas horas después de que terminara la carrera a primeros de este mes, Mikko Hirvonen fue declarado vencedor del Rally de Australia 2009, sin embargo, el piloto de Ford se negó a aceptar el trofeo.

A la conclusión del rally y tras vencer en la décima prueba del año del Campeonato del Mundo de Rallyes, Sebastien Loeb ocupó su puesto en lo más alto del podio y celebró su victoria.

No obstante, después de las verificaciones post-carrera, los comisarios penalizaron a los tres coches de fábrica de Citroën que llegaron a la meta: Loeb, Dani Sordo y Sebastien Ogier recibieron una sanción de un minuto cada uno al descubrirse que sus C4 WRC llevaban enganches no homologados en las barras antivuelco.

El equipo Citroën reconoció el error y aceptó la penalización, culpando a una imagen de baja calidad en el manual de homologación e insistió en que el error no le había dado ninguna ventaja a Loeb ni a sus compañeros.

El resultado de la penalización fue muy costoso para Citroën y Loeb, ya que la victoria del Rally de Australia se concedió al piloto de Ford y rival en el campeonato Mikko Hirvonen, dándole al finlandés cinco puntos de ventaja en la clasificación en lugar de un punto.

El jefe de Citroën Racing Olivier Quesnel, aunque perplejo y sorprendido por la sanción, propuso entregarle el trofeo al finlandés y, al parecer, Hirvonen declinó la oferta.

Hablando hace poco en Radio Monte Carlo, Quesnel explicaba: "Lo rechazó porque sabe que Seb ganó en Australia."

Hirvonen se ha portado con mucha clase en la situación del Rally de Australia. Si se convierte en Campeón del Mundo este año, quiere que la batalla se libre en los tramos y no en los despachos de los comisarios.

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